Huevos Benedict

Prepare la holandesa: bata las yemas de huevo, el jugo de limón, 1 cucharada de agua, la salsa Worcestershire y la pimienta blanca en la parte superior de una caldera doble sobre agua hirviendo. Agregue la mantequilla derretida, 1 o 2 cucharadas a la vez, mientras bate las yemas constantemente. Si la holandesa comienza a ponerse demasiado espesa, agregue una cucharadita o dos de agua caliente. Continúe batiendo hasta que se incorpore toda la mantequilla. Batir en sal, luego retirar del fuego. Coloque una tapa en la sartén para mantener la salsa caliente.

Prepare los huevos Benedict: llene una cacerola grande con 2 a 3 pulgadas de agua y hierva. Reduzca el fuego a medio-bajo, vierta el vinagre y mantenga el agua a fuego lento. Rompa un huevo en un tazón pequeño y luego deslice suavemente el huevo en agua hirviendo, sosteniendo el tazón justo por encima de la superficie del agua. Repita con los huevos restantes. Cocine los huevos hasta que las claras estén firmes y las yemas se hayan espesado pero no estén duras, de 2 1/2 a 3 minutos. Retire los huevos del agua con una espumadera, páselos por un paño de cocina para eliminar el exceso de agua y colóquelos en un plato caliente.

Mientras tanto, coloque una rejilla del horno a unas 6 pulgadas de la fuente de calor y precaliente el asador del horno. Dore el bacon en una sartén mediana a fuego medio-alto.

Tueste los muffins ingleses en una bandeja para hornear debajo del asador precalentado.

Unte los panecillos tostados con mantequilla blanda y cubra cada uno con una rebanada de bacon, seguido de un huevo escalfado. Coloque 2 muffins en cada plato y rocíe con salsa holandesa. Espolvorear con cebollino picado y servir inmediatamente.