¿Por qué es bueno desayunar?
El desayuno se considera la comida más esencial del día pues, tras muchas horas de reposo, activa nuestro metabolismo y se utiliza para volver a poner los minerales y vitaminas que nuestro cuerpo emplea mientras que dormimos. Un desayuno equilibrado contribuye a repartir nuestras calorías en todo el día, además de esto nos ofrece la seguridad de abastecer a nuestro cuerpo de los nutrientes precisos, más que nada en la temporada escolar.
Es la comida primordial de cada día, y los desayunos basados en la dieta mediterránea están entre los mucho más saludables y sugeridos. Aseguran que hay que dedicarle cuando menos 15 minutos y que ha de ser un instante de paz y relajación.
Entonces, si haces deporte, ¿es bueno o malo desayunar?
El desayuno es la primera comida del día que se toma tras el ayuno nocturno, con la que el organismo recibe energía que va a ser consumida en todo el día. Como muchas veces, no todo es blanco ni todo es negro, sino va a depender de la persona y/o del género de desayuno que esté mejorando.
Si un individuo está habituada a almorzar y tiene ganas, es tan bueno como alguien que no lo realiza y dura unas bastante tiempo. En el deporte, en la actualidad el ayuno se considera algo prácticamente preciso para hallar mejores desenlaces de deportes, pero no en todos los casos es de esta manera. Sepa cuándo marcha y cuándo no.
La relevancia de un óptimo desayuno
¿Te tomas unos minutos por la mañana para desayunar bien antes de salir de casa? Si no, deberías comenzar a llevarlo a cabo. Tras toda la noche, el cuerpo precisa nutrientes para marchar adecuadamente en el trabajo, por el hecho de que los escenarios de distintas substancias cerebrales dependen de nuestra dieta.
Nuestro cuerpo precisa hidratos de carbono que se transformen en glucosa para conseguir la energía que precisa el metabolismo para activarse, en tanto que estos escenarios se sostienen bajos a lo largo del sueño.
¿Qué desayunar?
Un desayuno conveniente debe contener cuando menos 400 calorías. De esta manera, los alimentos que no tienen la posibilidad de faltar para un desayuno equilibrado son:
- Modelos lácteos. Tienes que consumir un solo producto lácteo. Los más frecuentes son la leche o el youghourt. Son modelos que aportan vitaminas, proteínas y calcio.
- Cereales. Proponen hidratos de carbono y fibra. Puedes seleccionar panes, galletas, avena, etcétera.
- Fruta. Como todos saben, las frutas son fundamentales. Es conveniente integrar en el desayuno una fruta que aporte hidratos de carbono y vitaminas.
- Para tomar puedes tomar café, infusiones o té. El café nos contribuye la cafeína y también infusiones primordiales pues es un procedimiento de consumo de agua, que se requiere para nuestro cuerpo.
- Puedes complementar estos modelos con frutos secos, huevos o embutidos como queso, jamón, pavo, etcétera.