Galletas de desayuno de avena y bacon con glaseado de arce

Coloque el bacon en una sartén grande y profunda y cocine a fuego medio-alto, volteándolo ocasionalmente, hasta que se dore uniformemente, aproximadamente 10 minutos. Escurra las rebanadas de bacon en un plato forrado con toallas de papel. Cuando esté frío, pica el bacon y reserva.

Batir la mantequilla, el azúcar blanco y el azúcar moreno en un tazón grande hasta que quede esponjoso con una batidora eléctrica a velocidad media, luego mezcle el huevo y el extracto de vainilla hasta que estén bien combinados. Batir la harina, el bicarbonato de sodio, la sal y la canela en un tazón y mezclar la mezcla de harina con la mezcla de mantequilla. Agregue gradualmente la avena y el bacon, aproximadamente 1/3 de taza de avena a la vez, y cubra la masa. Refrigere por lo menos 1 hora.

Precaliente el horno a 375 grados F (190 grados C). Engrase bien las bandejas para hornear.

Saque aproximadamente 1/3 de taza de masa por galleta, haga bolitas y colóquelas con una separación de al menos 3 pulgadas en las bandejas para hornear engrasadas. Use un tenedor sumergido en agua para aplanar las bolas ligeramente.

Hornee en el horno precalentado hasta que las galletas estén doradas con los bordes ligeramente más dorados, de 10 a 12 minutos. Deje que se enfríe en las bandejas para hornear de 3 a 5 minutos antes de retirar para terminar de enfriar en las rejillas.

Para hacer el glaseado, mezcle el azúcar glas, el agua y el jarabe de arce en un tazón hasta que quede suave. Deje reposar el glaseado unos 5 minutos para que espese un poco; rocíe sobre la parte superior de las galletas. Permita que las galletas glaseadas reposen unos 20 minutos antes de guardarlas.