Potica

En un tazón pequeño, disuelva la levadura, 1 cucharadita de azúcar y 3 cucharadas de harina en leche tibia. Mezcle bien y deje reposar hasta que esté cremoso, aproximadamente 10 minutos.

En un tazón grande, bata la mantequilla con el azúcar restante. Agregue las yemas de huevo una a la vez, batiendo bien después de cada adición. Agrega la mezcla de levadura, la leche restante, 4 tazas de harina y la sal; mezclar bien. Agregue la harina restante, 1/2 taza a la vez, revolviendo bien después de cada adición. Cuando la masa se haya unido, colóquela sobre una superficie ligeramente enharinada y amase hasta que quede suave y elástica, aproximadamente 8 minutos. Engrase ligeramente un tazón grande, coloque la masa en el tazón y gire para cubrir con aceite. Cubra con un paño húmedo y deje crecer en un lugar cálido hasta que doble su volumen, aproximadamente 1 hora.

Engrase ligeramente una o dos bandejas para hornear galletas. Desinflar la masa y volcarla sobre una superficie ligeramente enharinada. Divida la masa en dos partes iguales y extiéndala hasta que tenga un grosor de 1/4 a 1/2 pulgada. Unte cada pieza con mantequilla derretida, miel, pasas, nueces y canela. Enrolle cada pieza como un rollo de gelatina y pellizque los extremos. Coloque la costura hacia abajo en las bandejas para hornear preparadas. Dejar levar hasta que duplique su volumen. Precaliente el horno a 350 grados F (175 grados C).

Hornee a 350 grados F (175 grados C) durante unos 60 minutos o hasta que la parte superior esté dorada.