Poppers de panqueques de papa crujientes (sin freír)

Precaliente el horno a 450 grados F (230 grados C). Cepille muy generosamente la mantequilla derretida en el fondo y los lados de 24 mini moldes para muffins. Coloque las latas en una bandeja para hornear y déjelas a un lado hasta que las necesite.

Agregue agua fría a un tazón grande hasta 1/3 de su capacidad. Ralla las patatas en el agua fría, luego llena el recipiente casi hasta el tope con más agua fría. Mueva las patatas con las manos para enjuagar el almidón, luego vierta la mayor parte del agua y vuelva a llenar con más agua fría. Continúe este proceso hasta que el agua salga casi clara. Vierta las patatas en un colador y deje escurrir durante unos minutos.

Transfiera las patatas ralladas a una toalla de cocina limpia. Envuelve las patatas en la toalla y exprime sobre un bol hasta que no salga más líquido.

Transfiera las patatas a un tazón limpio y agregue ajo en polvo, sal, pimienta, cayena y aceite de oliva. Espolvorea harina por encima, luego agrega Parmigiano-Reggiano. Mezcle y revuelva suavemente con las manos hasta que esté bien combinado y la mezcla se sienta húmeda.

Tome la mezcla de patatas del fondo del tazón para obtener la mayor humedad posible y llene los moldes para muffins preparados. Está bien si la mezcla sale por encima de la sartén de 1/2 a 1 pulgada.

Hornee en el centro del horno precalentado hasta que estén doradas por encima, caramelizadas por debajo y crujientes por todas partes, de 40 a 45 minutos.

Retire del horno y deje reposar en la fuente durante 5 minutos antes de voltearlos sobre la bandeja para hornear.